Las previsiones de la telemática aplicada en seguros para los próximos 10 años son muy interesantes en todos los ámbitos, incidiendo principalmente sobre la mejora de los servicios y prestaciones a los asegurados

Los principales cambios previstos son los siguientes:

1.- Monitorización de nuestra salud.  

La utilización de wearables (relojes, pulseras de actividad, básculas, etc) se extenderá de forma generalizada. Diversas plataformas informáticas, permiten hoy en día monitorizar toda esta información de forma centralizada.El expediente médico digital es una realidad actualmente, y se generalizará de forma exponencial. Las aseguradoras son las principales interesadas en estas nuevas plataformas, las cuales además promueven hábitos de vida saludables. El futuro pasaría por los seguros personales individualizados, en los que el precio se adaptaría a la información particular, que cada asegurado acepte compartir con su aseguradora.

2.- Monitorización de nuestro hogar.           

En este caso será la domótica y los electrodomésticos conectados, los que avisarán de cualquier fallo o incidente, activando un aviso o alarma a los contactos que se hayan programado. Esta tecnología está muy desarrollada, y la previsión será su utilización de forma generalizada, con el apoyo de las aseguradoras. El objetivo sería aminorar las consecuencias de  incendios, inundaciones, robos, etc. En la actualidad,  los seguros ya contemplan la existencia de alarma conectada, como requisito de seguridad o como bonificación en la prima. En un futuro, se prevé que las aseguradoras intensifiquen este tipo de dispositivos,  llegando a gestionar la instalación, y que la prima se establezca en base a los dispositivos que se hayan conectado.

3.- Se desarrollarán seguros personalizados por cliente.     

Se plantearán coberturas agrupadas en un mismo contrato, para diversos riesgos (Hogar, salud, vida, viajes, etc). La conexión permanente de los asegurados que así lo decidan, facilitará a las aseguradoras información muy precisa de estilo de vida, desplazamientos, ubicación, etc. Esto permitirá realizar evaluaciones de riesgo muy precisas y desarrollar productos a «la carta» para determinados perfiles de clientes, unificando en un solo contrato coberturas diversas.